Inspírate con el arte de Ángel Bayona, que captura la esencia de la naturaleza y eleva la sensibilización ambiental a través de su trabajo.

 

Entrevista por: Martina Pisana

Editado por: María Lucía Hormaza

 

Ángel Bayona es un apasionado fotógrafo ecuatoriano, quien ha dedicado gran parte de su vida a documentar la biodiversidad de su país a través del lente de su cámara. Desde pequeño sintió una inclinación hacia las artes, y a lo largo de los años ha consolidado una carrera que abarca desde el diseño gráfico hasta el teatro, lo cual finalmente lo llevó a la fotografía. Actualmente es presidente de la Asociación de Fotógrafos Ecuatorianos y guardaparque en el Área Nacional de Recreación Isla Santay, una área protegida que ha sido testigo de muchos de sus proyectos de conservación. Su trabajo se enfoca en la sensibilización ambiental, buscando concienciar a las personas sobre la importancia de preservar la naturaleza a través de su arte.

 

Preguntas y respuestas:

 

1.  ¡Hola Ángel! ¿Nos comentarías cómo empezó tu carrera en la fotografía?

 

Siempre me ha apasionado el arte desde niño. Mi carrera empezó oficialmente cuando estudiaba diseño gráfico en la universidad, pero mi interés por la fotografía surgió al trabajar como guardaparque en la Isla Santay, donde sentí la necesidad de documentar las especies que encontraba. Me llegó una cámara de casualidad, y aunque al principio tuve problemas con ella, esa fue la herramienta con la que empecé a tomar mis primeras fotos. A partir de ahí, fui adquiriendo más conocimientos y mejorando mi equipo, lo que me permitió participar en concursos y obtener becas para seguir aprendiendo.

 

2.  Cuéntanos, ¿Cuál consideras que ha sido tu mayor logro como fotógrafo hasta ahora?

 

He ganado varios premios, tanto a nivel nacional como internacional, en concursos de fotografía de áreas protegidas y vida silvestre. Uno de mis logros más significativos fue un concurso organizado por el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo, sobre los Objetivos de Desarrollo Sostenible, donde obtuve el segundo lugar. Para mí, es importante que mi trabajo no solo sea reconocido, sino que también transmita un mensaje claro de conservación.

 

3.  ¿Cuál crees que es el mayor desafío al fotografiar la vida silvestre?

 

Uno de los principales retos hoy en día es la seguridad. Al salir a fotografiar en zonas aisladas, a menudo hay que enfrentar riesgos relacionados con la seguridad personal. Aparte de eso, conocer bien el lugar y contar con un guía local es esencial. Hay que ser respetuoso con la fauna y entender que interactuar con la naturaleza conlleva ciertos riesgos, como picaduras de insectos o encontrarse con fauna silvestre.

 

4. ¿Consideras que al fotografiar la vida silvestre tu integridad se ha visto expuesta?

 

 Sí, he tenido situaciones complicadas, especialmente al fotografiar cocodrilos, caimanes o serpientes venenosas. Sin embargo, el mayor peligro que he enfrentado no ha sido en la naturaleza, sino en interacciones con humanos. Por ejemplo, en áreas protegidas he tenido problemas con guardias que no permitían tomar fotos, incluso cuando no había razones válidas para prohibirlo.

 

5. ¿Podrías compartir alguna experiencia significativa que te haya llevado a una profunda reflexión mientras realizabas tu trabajo fotográfico?

 

Sí, una experiencia particular que me gustaría compartir fue cuando estaba fotografiando en la Isla Santay. Una vez estaba tomando fotos de la fauna local cuando, de repente, mi cámara se cayó al lodo. Pensé que se había dañado para siempre, pero, sorprendentemente, días después volvió a funcionar. Este evento me enseñó a ser paciente y persistente, y fue el punto de partida para que continuara con la fotografía de vida silvestre, documentando las especies de la isla y sensibilizando a las personas sobre la importancia de la conservación.

 

6.  ¿Cómo tu trabajo aporta a los objetivos de desarrollo sostenible (ODS) ?

 

En mi rol como guardaparque y fotógrafo, he estado siempre comprometido con la conservación de la biodiversidad, especialmente en áreas protegidas como la Isla Santay. Mi enfoque principal ha sido utilizar la fotografía como una herramienta para educar y sensibilizar sobre la importancia de preservar los ecosistemas. Uno de los ODS con los que estoy más vinculado es el de "Vida de ecosistemas terrestres", ya que documentar y mostrar la fauna y flora de estas áreas permite que más personas se conecten con la naturaleza, lo cual es clave para promover su conservación. 

 

7. ¿Cómo crees que impacta tu trabajo en la sensibilización ambiental de tu país?

 

A través de la fotografía, he podido generar conciencia sobre la biodiversidad que existe en Ecuador, y en particular en la Isla Santay. He tenido la oportunidad de capturar imágenes de especies como los tigrillos, las cuales sorprendieron a muchos ciudadanos, quienes no sabían que estos animales habitaban en áreas cercanas. Este tipo de trabajo ha sido fundamental para que las personas empiecen a valorar y proteger la naturaleza. La fotografía es una herramienta poderosa para la educación ambiental, ya que ayuda a que la gente conozca y ame la naturaleza, y como siempre digo: "No se puede conservar lo que no se conoce". Si bien el impacto ha sido positivo, aún falta mucho por hacer, especialmente en términos de políticas y programas de educación ambiental a nivel municipal y comunitario.

 

8.  Cuéntanos sobre el mes de la fotografía y tu participación en él.

 

 Mi proyecto relacionado con el "Mes de la Fotografía" comenzó hace unos cuatro años, cuando la directiva anterior de la Asociación de Fotógrafos Ecuatorianos decidió crear un festival y agenda bajo ese nombre. A lo largo de agosto, organizamos diversas actividades como charlas, exposiciones, festivales, y portafolios abiertos, entre otros eventos, para celebrar el arte fotográfico. Este año, mi participación ha sido significativa, ya que, como presidente de la asociación y guardaparque, he promovido que el enfoque del festival esté alineado con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), haciendo un vínculo directo entre la fotografía y la sensibilización sobre temas como la naturaleza, el desarrollo sostenible y la educación. Además, logramos alianzas clave con instituciones como el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo para involucrarlos activamente en nuestras actividades.

 

9. ¿Qué proyectos tienes a futuro?

 

Actualmente estoy trabajando en varias exposiciones, tanto en Ecuador como en el extranjero. También tengo en mente un proyecto colaborativo que busca integrar a artistas de diferentes disciplinas. Mi objetivo es seguir explorando y desafiando mis propios límites, y contribuir al crecimiento de la escena artística local e internacional.

 

10. ¿Qué consejo le darías a los fotógrafos emergentes?

 

Les diría que sigan adelante, que no se detengan. El arte, incluida la fotografía, no es algo reservado únicamente para aquellos "dotados por los dioses", sino que se trata de disciplina, constancia y aprendizaje. Es importante estudiar, caer y levantarse continuamente. Participar en encuentros, festivales y concursos es clave, ya que la retroalimentación que se obtiene en estos espacios es fundamental para seguir mejorando.